Lo que vienen presentando los Partidos Políticos: Son Realmente Planes de Gobierno?

“Sin un buen plan, no ha de esperarse una buena ejecución” Napoleón

Compelidos por la Ley de Partidos Políticos (Ley 28094) que obliga a estas organizaciones formular sus respectivos Planes de Gobierno, como requisito para poder participar en las Elecciones Generales, estos están siendo presentados ante el JNE.
Dado que idealísticamente, el debate electoral deberá centrarse en el contenido de estos documentos, es que nos hemos planteado la misma pregunta que se haría Descartes antes de iniciar la solución de un problema. ¿Qué es un Plan de Gobierno y que debe contener?

La pregunta es pertinente porque en campañas anteriores, algunos candidatos han presentado Planes de Gobierno de cuatro hojas y en edición de bolsillo. No creemos que los mejores sean los más voluminosos. Pero tampoco, que en cuatro hojas, pueda expresarse lo que se quiere hacer por el país en cinco años.

Plan de Gobierno y Proyecto Nacional

Apelando a los conceptos doctrinarios válidamente admitidos y que se enseñan en varias Universidades del país, “deseamos empezar por el principio”. El Proceso de la Política Nacional es un conjunto de acciones secuenciales, que se inicia con el Estudio de la Realidad Nacional, definida como la totalidad de medios, hechos y situaciones que presenta el Estado como producto de su desenvolvimiento histórico.
En base a ese Estudio se establecen los Objetivos Nacionales, que son la expresión de los intereses y aspiraciones vitales que la nación busca satisfacer en un determinado período de su existencia. Normalmente en una generación: treinta años.
Conteniendo estos Objetivos Nacionales, se formula el Proyecto Nacional, documento vital para darle Visión de Futuro al país, y que los esfuerzos sucesivos sean complementarios, sacudiéndonos de la improvisación e inmediatez, con la que se han conducido los sucesivos gobiernos durante toda nuestra historia republicana.
Dado que el Proyecto Nacional tiene un horizonte temporal de largo plazo (30 años), en él estarán comprometidos los esfuerzos de por lo menos seis gobiernos, razón por la cual, cada uno de ellos deberá formular su Plan de Gobierno para cinco años en función de los objetivos de largo plazo.
Ejemplo: la Realidad Nacional nos dice que hay en el país (hipotéticamente) 30% de analfabetos. Divididos en seis gobiernos, cada uno de ellos tendría que erradicarla en 5%. Esta meta, tendría que estar incluida en su Plan de Gobierno como objetivo. Al término de su mandato, el gobernante tendría que rendirle cuentas al país respecto al compromiso y su cumplimiento. Probablemente, este obligatorio balance, sea el que esté impidiendo que los partidos políticos, formulen el Proyecto Nacional que el país necesita. Quien no haya cumplido con las metas contenidas en su Plan de Gobierno, debiera recibir el peor castigo político: la indiferencia y que nunca más, osen ofrecerse como candidatos. Si esto se hubiera cumplido, muchos de los que hoy gobiernan o pretenden gobernarnos, deberían estar en el ostracismo político.
Un Plan de Gobierno para ser tal, debe contener primero la Concepción Ideopolítica del partido; es decir el cristal ideológico a través del cual se ha auscultado la realidad nacional y a través del cual se estima, discurrirán sus políticas de gobierno para acercar en cinco años al país respecto a su imagen futura.
Luego, sectorialmente, contener las conclusiones del estudio de la realidad nacional y luego, las políticas que permitirán contribuir a solucionar los problemas detectados, así como las metas cuantificadas que se pretende alcanzar. Es decir el cómo.

¿Y las Ideologías?

Obviamente, esto requiere que los Partidos Políticos sean tales, como establece la Estasiología. Es decir, tener una Ideología. Es oportuno preguntarse, ¿tienen ideología todos los llamados “partidos políticos” en el país? ¿Puede ser ideología honradez, tecnología, trabajo? ¿Puede serlo “Toledo más trabajo”? ¿O el “etnocacerismo” (?) ? A todas luces, estas frases no son (ni remotamente) ideologías. ¿Es cierto que las ideologías están en extinción? Falso. Si esto fuera así, ¿cuál sería la “argamaza” que une a los militantes de un partido? ¿El caciquismo de su jefe?
Este apretado conjunto de reflexiones, cobran especial pertinencia, dado que los “partidos políticos” han sido obligados a presentar sus Planes de Gobierno. Como ciudadanos enterados, examinémoslos a la luz de los conceptos universalmente admitidos, que acabamos de sostener. Que cualquier folleto, no lleve inmerecidamente el título: Plan de Gobierno, como ha sucedido hasta hoy.

Castiguemos la Demagogia

Exijamos hacer Política en serio. Asimismo, demandemos que el debate electoral sea la confrontación dialéctica y alturada del contenido de estos documentos; y no permitamos que ofertas electoreras dichas por pura conveniencia, conviertan en carnaval lo que debe ser un proceso serio.
¡Voy a duplicar el sueldo de los maestros! ¡Voy a crear el Ministerio de la Juventud! ¡Daremos trabajo a los más pobres! ¡Le daremos más alimentos a los comedores populares!, son formas viles de ganar votos. Que la vileza, no reemplace a la sensatez. Castiguemos este tipo de ofertas por irreales y demagógicas, no votando por ellas. ¡Voto responsable, por el bien de nuestros hijos! Esta es nuestra palabra.